Camarada Encarna

Otra flor de nuestro jardín se nos marchita, feliz en su mundo de sueños de arco iris y unicornios, en un mundo irreal donde todo era perfecto. Dónde la humanidad no se encontraba en una encrucijada. Donde no se reflejaba la especulación y la corrupción, el consumo de drogas, la cultura, la filosofía burguesa, la violencia, el egoísmo y la indiferencia hacia los sufrimientos de los demás. Ese mundo donde ella con su inseparable Herminio eran las luces que al resto de nosotros nos guiaban.

Años de lucha, hambre, penurias, guerra, dictadura, hicieron en ti, y en Herminio mas latente la lucha por los derechos humanos.

Os revelasteis contra un tirano que abusó de un país durante 40 años, aún sabiendo que los años de cárcel o el fusilamiento estaban siempre presentes en todos los pasos que dieseis contra la restricción de las libertades. Pero no os amilanasteis.

Mi muy querida Encarna, no tenemos palabras para agradecerte a ti a Herminio y a tantos y tantas como tu, disteis todo por el Partido Comunista de España , fuisteis un ejemplo de bondad, generosidad, lucha, camaradería, y siempre fieles a nuestros principios comunistas. Algo que se debería tomar de ejemplo en estos tiempos.

Ahora en un rincón del recuerdo dónde tú y tú adorado Herminio estaréis siempre con nosotros, con lágrimas en los ojos y con nuestra más ferviente admiración te decimos: Camarada Encarna continuaremos la lucha, por vosotros y por todas las personas que se quedaron en el camino y nos legaron este instrumento tan grande que es el Partido Comunista de España. Seguiremos luchando por las libertades, por la igualdad de todas las personas sean del genero que sean y del color que sean, por una sociedad justa, republicana y comunista.

”Seguiremos luchando porque cuando se tiene a favor las leyes de la historia, los intereses del futuro, los requerimientos económicos y morales que conducen a la revolución cuando se sabe con certeza lo que se quiere, las armas propias y las del enemigo cuando hay confianza en uno mismo se trabaja con aquellos en los cuales se tiene confianza; cuando se sabe que la obra revolucionaria exige sacrificios y que toda devota semilla fructificará centuplicada, entonces se es invencible”(Víctor Serge).

Aquellos que lo vieron como tú Encarna, saben que la revolución es invencible aun antes de vencer.

Hasta siempre camarada.

Ana María Casado Fueyo. Responsable de Organización del PCA de Mieres